Constantemente nos avisan de no fiarnos de chats y demás sitios de encuentros en internet, pero yo, en una ocasión no hice caso a tal consejo. Bendita de mi!!!!
Era abril, esa primavera parece que vino con fuerza y no lo digo por el asma que me provocaba la alergia a la gramínea que tengo, sino por el agotamiento que sentía, siempre andaba cansada, se me fue el apetito, no salía de mi habitación nada más que para hacer mis necesidades básicas (baño y comer lo justo para que mi madre no tuviera que echarme nuevamente otra bronca...) Tanta soledad, hizo que me adentrara en internet, más concretamente en un chat. Antes me había mostrado reticente a estas cosas, además no me considero una persona acomplejada físicamente ni antisocial, sólo que no me apetecía salir, todas mis amigas de la infancia parece que tenían sus vidas ya hechas, con sus novios, algunas pensando en casarse incluso y yo me había quedado como atrás, al menos eso parecía desde fuera, pues mi interior no me pedía tener un novio, compartir mi tiempo con otra persona o rendir cuentas a nadie.
Todo empezó buscando información sobre mi pintor favorito, siempre me había gustado la pintura y de hecho había pintado muchos cuadros inspirándome en su obra. El caso es que encontré un foro en el que se hablaba de él, más concretamente de un cuadro del cual estoy prendada y así fue como fui enganchándome sin darme cuenta a este mundo. Es genial conocer a gente con las mismas inquietudes y gustos que los tuyos.
Lo recuerdo perfectamente, alguien lanzó una pregunta sobre la expresión del rostro de la dama incrustada en el óleo y yo fui la primera en responder, por lo visto mi respuesta despertó el interés del que había creado el hilo y volvió a escribir pero dirigiéndose a mi personalmente. Yo no me tomé cuenta y le respondí, así fueron sucediendo preguntas y respuestas durante toda una tarde. Al día siguiente mi sorpresa fue al conectarme, ver que tenía un mensaje privado en mi cuenta del foro, era de Ninot, al menos, así se llamaba su nick, invitándome a intercambiar nuestros correos electrónicos y así poder tener conversaciones más fluidas sobre nuestro pintor favorito. Me pareció interesante, a la vez que extraño, no sé, no era amiga de messenger ni nada de eso, mi correo lo usaba únicamente para recibir información de cursos, de mis estudios y poco más. Después de pensarlo y pensarlo, creo que me puse hasta roja jajaja se lo di y en seguida me agregó.
La primera conversación que tuvimos fue muy rara, a mi me lo pareció, me limité a contestar con monosílabos, pero conforme iban sucediendo los días, me sentía más cómoda y logré mantener conversaciones interesantes acerca del mundo de este arte. Poco a poco se fue ganando mi confianza y supongo que yo la suya, las conversaciones ya no sólo eran de cuadros, dibujos ni de carboncillos, ya las témperas se mezclaban con preguntas más personales, chistes, muchas risas y alguna pregunta indiscreta. El caso es que ya estaba totalmente ligada al mesenger, me acostaba muy tarde hablando con Ninot, una vez en la cama, me costaba muchísimo dormir pensando cómo sería, si algún día lo conocería, me despertaba como desesperada para conectarme y leer algo que me había dejado escrito la noche anterior...
Era como una relación infinitamente personal, en el sentido que sólo existíamos él y yo, como si no hubiese entorno más que cuadros, no había amigos de por medio, no tenía que cortarme a la hora de decir lo que me apeteciera pues sólo lo leería él... era como un submundo creado por y para dos personas, Ninot y yo. Todo era fantástico, nunca en mi vida había sentido que nadie estuviese tan pendiente de mi, tuviera tantos detalles como tuvo conmigo, me regalara poemas, frases cortas antes de dormir y al despertar, era un sueño.
Pero claro, de todos los sueños hay que despertar y a mi del mío me costó mucho, pero hoy ya estoy totalmente despierta. Un día, como de costumbre, me levanté rápidamente a ver qué me había escrito pero ese día no había nada, además él no estaba conectado. Pensé que le había pasado algo, era la primera vez en más de un año que no me había dejado nada en la bandeja de entrada, intenté tranquilizarme y esperar a que se conectara y me diera alguna explicación. Los minutos que tardé en saber de él se me hicieron eternos, estaba asfixiada, muy nerviosa... todo se calmó cuando leo “buenos días preciosa”, todo volvió a tener color, luz, sentido. No me atreví a pedirle ningún tipo de explicación y la conversación de ese día fue de lo más normal. Al día siguiente sucedió algo parecido, tampoco me había dejado mensaje alguno pero esta vez tardó mucho más en contestar, no fue hasta la tarde cuando pude hablar con él, yo estaba como loca, comencé a pedirle explicaciones, cual periodista curioso y no tuve más respuesta que un “me estoy agobiando, creo que es mejor que dejemos esto así”... Se me cayó el mundo, no lograba comprender nada, nunca me había hablado así, parecía otra persona, yo no quería que eso acabara de esa forma, al menos que me explicase qué le había pasado y así poder intentar salvar lo nuestro. No hubo manera, nunca más se volvió a conectar, nunca más recibí ningún mensaje ni correo interesándose por mi.
Ya ha pasado tiempo, de todo se sale, cuesta mucho a veces, pero se sale, ahora tengo el trabajo que siempre deseé, en un museo muy conocido, las cosas laboralmente me van muy bien y en el tema personal, sigo como antes de conocer a Ninot, no tengo ni prisa, ni tiempo de compartir mi vida con nadie, cosas así no hay que buscarlas, se tienen que poner en nuestro camino y darnos cuenta que están ahí.
q historia mas bonita, es cierta?
ResponderEliminarNo, no es cierta, fue un momento de inspiración de mi neurona, a ver si va despertando y me deja escribir algo más jajaja Saludos y gracias por leerla
ResponderEliminarque parado tienes esto,apenas escribes nada nene
ResponderEliminares una bonita historia
ResponderEliminartiene razon el anonimo de arriba ^^ jeje
pero tengo una pregunta.nada mas curiosidad...
espero no t ofendas...
porque hablas refiriendote a vos como una chica?
no quiero causar mala impresion ni nada...
a mi me paso algo parecido a esta historia...
lo mas triste es que yo fui quien se desconecto para siempre de su vida y sin siquiera despedirme... fue algo que nunca quise hacer...
me sigo sintiendo curiosa de saber si el se preocupó o se preguntó ¿por qué se fue de mi vida?... y yo me cuestiono ¿porqué lo hice?
Buenas, el hablar como una chica o un chico es simplemente meterte en la piel del personaje.
ResponderEliminarRespecto a la persona que ha vivido algo parecido a la historia, decir que esa historia la han vivido muchas personas. A veces hacemos cosas casi involuntarias de las cuales nos acordamos de por vida... Suerte